EEUU amenaza a China con implementar medidas proteccionistas, culpar a China es una excusa para aprobar aranceles, asegura Pekín.
Todos los productores de acero mundial están intentando convencer a China para que reduzca su producción. El mercado sufre una situación de sobre-oferta de acero que está hundiendo los precios y poniendo en serias dificultades a muchas empresas. Aunque es cierto que China puso en marcha medidas para reducir la producción de este metal, un repunte puntual de los precios del acero en Pekín ha puesto a funcionar de nuevo toda la maquinaria productiva, incluso algunas empresas que parecían muerta han vuelto a encender sus hornos para producir y convertirse en los ‘zombies’ del acero.
Los precios del acero en China han subido este año un 77% por factores específicos del país, lo que ha provocado que muchas que empresas que habían dejado de producir hayan vuelto a funcionar al 100% de su capacidad. Ante esta situación que golpea de lleno a otros productores del mundo, EEUU y otros países han pedido una acción urgente para hacer frente al exceso de capacidad global de acero. A día de hoy, según los cálculos de la OCDE sobra el 32,5% de la producción mundial de acero.
Representantes de EEUU, Canadá, la Unión Europea, Japón, México, Corea del Sur, Suiza y Turquía acordaron que era imprescindible una reestructuración urgente de la industria del acero. También acordaron que sus gobiernos eviten otorgar subvenciones u otras ayudas que sostengan las plantas de acero deficitarias o fomenten la capacidad adicional.
En un comunicado, responsables estadounidenses han señalado que continuarían presionando por lograr una acción conjunta para reestablecer el equilibrio en el mercado: «Es nuestra meta compartida que otras economías, incluyendo a China, lleguen a reconocer el valor de estas medidas y se unan a nuestro esfuerzo colectivo para abordar las causas del actual problema de exceso de capacidad».
Washington ha responsabilizado a China del fracaso de las negociaciones que llevan meses produciéndose, asegurando que Pekín necesita actuar sobre el exceso de capacidad o enfrentarse a posibles acciones comerciales de otros países.
Sin embargo, responsables de China sostienen que el gigante asiático ya estaba y está tomando medidas suficientes para limitar la capacidad, mientras que la prensa estatal no duda en señalar que la estrategia de culpar a China por la crisis global de la industria es una excusa para implementar medidas de proteccionismo que podrían resultar contraproducente.
La producción de acero de China alcanzó un nuevo récord en marzo, tras el repunte de los precios y el alza de la demanda dentro del gigante asiático. La OCDE ha asegurado recientemente que la capacidad global de producción de acero fue de 2,37 millones de toneladas en 2015, pero en la actualidad sólo se está utilizando el 67,5% de esa cantidad, por debajo del 70,9% en el 2014.
Fuente: El Economista.
