Se erige en la ciudad inglesa de Brighton y rompió el récord Guinness por su ultra fina estructura. Construida por los creadores del London Eye, cómo es por dentro esta obra que rompe las reglas hasta ahora conocidas de la arquitectura.
La Torre i360 de British Airways, emplazada en la ciudad inglesa de Brighton, fue valorada por el Guinness World Record como la más fina del mundo.
La valoración del Guiness será un honor que atraerá a miles de turistas a ver esta innovadora atracción arquitectónica del Reino Unido, ideada por los mismos creadores del famoso London Eye y el Treetop Walkway, de la capital de Inglaterra.
Esta moderna torre mide 160,469 metros, y posee un diámetro de 3,9 metros. La estructura, que aún no fue abierta al público, fue diseñada nada más ni nada menos que por Marks Barfield Architects, el grupo que tuvo a su cargo la construcción del icónico London Eye, que se ubica a orillas del río Támesis y que ofrece una de las vistas más espectaculares de la zona londinense.
La impresionante estructura se ubica en Brighton, Inglaterra
«Se utilizó lo más avanzado de la ingeniería en la construcción de esta torre», declaró ante la prensa internacional el ingeniero John Roberts, director del British Airways i360. «Su relación entre altura y ancho es considerablemente mayor a la de otro edificios altos como The Shard o la Torre BT», agregó.
Roberts aclaró que no se propusieron romper ningún récord, sino que querían construir una torre muy delgada, que pudiera cargar un especie de transbordador de 94 toneladas, con la capacidad para 200 personas a la vez, sin dudas un desafío de proporciones enormes, más considerando la relación entre ancho y altura.
Otro de los grandes desafíos para la nueva torre es que pueda aguantar los fuertes vientos de la zona, y cumpla con todas las normas de seguridad, pero Roberts asegura que el objetivo se cumplió y que «no hay manera de que este edificio se caiga», algo que seguro calmará hasta a los más paranoicos, aunque subirse a esta torre probablemente no sea la mejor idea para los que sufran de vértigo.
Para ser considerada para el Guinness World Record, la torre British Airways i360 tuvo que presentar todo tipo de información, incluyendo datos técnicos y medidas específicas como la altura y el ancho del edificio. Los que verificaron que la torre cumpliera con todos los requisitos fueron los ingenieros Tim Ibell; profesor en la Universidad de Bath y presidente del Instituto de Ingenieros Estructurales durante el 2015, y el doctor Pierfrancesco Cacciola; de la Universidad de Brighton.
Y lo más sorprendente de este reconocimiento es que la torre British Airways i360 todavía no abrió al público, y su inauguración oficial está prevista para este invierno -verano en Inglaterra, por lo que se espera que, gracias a que rompió un récord mundial, se convierta en una de las grandes atracciones turísticas de la zona, tanto por su innovación arquitectónica como por la gran experiencia de las vistas panorámicas que ofrece.
La torre British Airways i360 fue ideada y construida por los que crearon al famoso London Eye. La firma Marks Barfield Architects fue la encargada de traer a Brighton esta innovadora y moderna pieza arquitectónica, y lograr que alcance sostener un peso determinado y que aguante los fuertes vientos que azotan esta zona, trabajando con proporciones delgadas.
Su obra más conocida, el espectacular London Eye -también llamado Millennium Wheel- es un mirador de 135 metros, ubicado en los Jubilee Gardens del South Bank del río Támesis, entre los puentes de Westminster y Hungerford. Desde que abrió, en el año 2000 -inaugurando el milenio- se convirtió en uno de los puntos más concurridos de Londres, debido a las vistas que ofrece de la ciudad, y a su diseño.
Siempre innovadores, los arquitectos David Marks y Julia Barfield -marido y mujer, por cierto- también crearon el Treetop Walkway, un paseo elevado ubicado en los Kew Gardens en Londres. A 18 metros de altura, y con un recorrido de 200 metros, esta obra fue inaugurada en el año 2008 durante el Día de la Biodiversidad. Este proyecto arquitectónico permite que la gente camine entre los árboles, o, más bien, entre sus copas.
La estructura parece mezclarse perfectamente con sus alrededores y fue una idea «verde» que revolucionó el sector. Menos conocido que el London Eye, es un paseo imperdible y permite que los turistas y locales respiren un aire fresco en el medio de la vertiginosa ciudad, entre pájaros, insectos. El diseño del Treetop Walkway está basado en la secuencia numérica Fibonacci, muy presente en los patrones naturales con los que crecen las plantas.
Fuente: Infobae
