La mitad del año es una etapa relevante para Madera21 y la organización de sus cinco concursos internacionales, ya que tres de éstos cerrarán su periodo de postulación durante julio, mientras que los restantes lo harán en agosto. Por ello, reunimos sus fechas, temáticas, bases y criterios evaluativos, con los que se determinarán a los ganadores y finalistas respectivos.
Cabe recordar que los anteriores serán reconocidos en la XVII versión de la Semana de la Madera, a celebrarse este año de manera presencial —entre el 19 y 23 de octubre— en el Parque Bicentenario de Vitacura, tras dos años de realización online debido a la pandemia.
El tradicional concurso de Madera21 mantendrá sus postulaciones abiertas hasta el 25 de julio, bajo la convocatoria “Vivienda y micro-radicación”, la cual buscará intensificar el uso de suelo disponible a partir de la madera, con el fin de transformar la problemática del hacinamiento en una oportunidad que permita viviendas más adecuadas para el bienestar de sus ocupantes y así evitar su erradicación a zonas alejadas.
El uso del material deberá entregar reglas dimensionales y estructurales en cada uno de los proyectos, otorgando oportunidades de flexibilización y confort gracias a sus características y abriendo la posibilidad de asociación con diferentes mecanismos técnicos. Atributos como la serialización, la optimización de la producción en serie y el montaje en seco, serán especialmente valorados en las propuestas.
Otro aspecto con que se identificarán las mejores iniciativas será la incorporación de la madera desde su condición de pilares, vigas y láminas, según sea el sistema constructivo decidido por los equipos, ya que será una oportunidad de visualizar de mejor manera los montajes y el desarrollo en el tiempo, al igual que de conocer cómo sus autores confirman que estos sistemas constructivos afectarán positivamente las modulaciones de los espacios.
La prefabricación y la posibilidad de repetición de la solución, ya sea a nivel colectivo de la vivienda o la repetición a escala de un conjunto de lotes, estandarizar encuentros, revestimientos, cubiertas y detalles de las obras. Y considerando su temática, otro punto relevante será el acercamiento a las comunidades, entendiendo las necesidades de las personas que enfrentan problemas de hacinamiento, para así reconocer los puntos a resolver.
Orientadas a los equipos de arquitectura de las universidades acreditadas de Chile e Iberoamérica, las postulaciones se evaluarán por medio de cuatro criterios. El primero será la Fundamentación y coherencia del proyecto (15% del puntaje), continuará la Estrategia de localización, emplazamiento y resolución programática y espacial (30%), el siguiente será la Propuesta arquitectónica desde el material (35%), para finalizar con la Innovación de la propuesta (20%).
También con fecha de postulación abierta hasta el 25 de julio, este concurso identificará los mejores proyectos elaborados con el material, a través de la temática “De una pieza de madera a un objeto de valor: Valorización, optimización y sustentabilidad”. Es así como se invitará a los equipos provenientes de carreras de diseño y afines, de Chile e Iberoamérica, ya sean de universidades o centros de formación técnica y profesionales.
Las propuestas que se recibirán deben lograr un objeto de valor de uso diario, funcional o de sistema de productos, que cumpla con criterios de comercialización B2C (Business to Consumer) y de producción industrial futura, del mismo modo que con parámetros de rendimiento, de diseño, forma, función y sostenibilidad. En ese punto, se analizará la revalorización de la madera como un material de alta calidad en lo propuesto.
Lo anterior abrirá las puertas para pensar en diversos ámbitos, como en compuestos para impresión 3D, en piezas de apoyo para la construcción, en ingeniería, en el hogar, en la energía, los textiles, el packaging y el mobiliario, entre otros aspectos donde la investigación y la innovación sumarán posibilidades e incluso más rubros donde la madera pueda ser un valor agregado.
El jurado considerará, de manera especial y significante, la creatividad de los postulantes, ya sea desde su solución formal, funcional o en su propuesta conceptual, valorizando las técnicas utilizadas, su potencial y proyección de escalamiento, la identificación de oportunidades relevantes, del mismo modo que con el estado del arte actual del uso maderero.
En esa lógica, los criterios con que se evaluarán las propuestas serán la Generación conceptual, solución técnica y creación de valor a través del material (25% del puntaje), la Solución formal y de producción (25%), la Cualidad funcional (25%) y su Impacto y potencialidad de la innovación (25%).
El 25 de julio también terminarán las postulaciones del concurso ligado a la ingeniería y construcción en madera, cuya temática será abierta y con el objetivo de destacar memorias, proyectos de título, investigaciones, patentes, estudios de postgrado, de sustentabilidad, de fuego o ingeniería estructural. Su convocatoria se extenderá a estudiantes o egresados de carreras de construcción civil e ingenierías afines.
Al no contar con un requerimiento específico, el jurado del certamen distinguirá los proyectos que se relacionen, de manera directa o indirecta, con la utilización de la madera en la construcción. Lo último desplegará variadas opciones en las cuales incidir, tales como productos, tecnologías, tratamientos, industrialización y sustentabilidad, así como asuntos específicos como la protección ante el fuego, conectores, diseño sísmico y estructural, entre varios aspectos de ingeniería estructural.
Se relevarán las postulaciones que consideren los puntos anteriores y que, de manera creativa y con altos estándares de calidad, difundan la investigación de excelencia en ámbitos constructivos e ingenieriles. Todo esto, para avanzar en la divulgación del conocimiento y las posibilidades con el material en estos sectores, junto con potenciarlos e impulsar a Chile como referente.
A partir de esta convocatoria, Madera21 vinculará, potenciará y enaltecerá este tipo de desarrollos con madera desde la ingeniería y la construcción, para dar espacio a los futuros investigadores y profesionales de ambos rubros, pues se avanzará en nuevos estándares de construcción, calidad e innovación.
Dentro de los criterios a evaluar por parte del jurado estarán los Grados de innovación y creatividad (20%), el Potencial comercial y la pertinencia de la investigación (30%), la Relevancia en la investigación de la madera como material de construcción (30%), la Solidez de las conclusiones de la investigación (10%) y la Rigurosidad en el desarrollo de la metodología (10%).
El concurso basará su convocatoria en la bioeconomía y su potencial innovativo con la madera, comprendida como la producción, utilización y conservación de los recursos biológicos, la ciencia, la tecnología y el conocimiento, que proporcionen nuevos productos, servicios y procesos para una economía sostenible. Su convocatoria, a diferencia de los certámenes anteriores, estará abierta hasta el 15 de agosto.
La iniciativa no contará con categorías o una temática específica, pero sí presentará tres ámbitos orientativos para guiar a sus postulantes. Estos son la Productividad y Sustentabilidad de su propuesta, los aportes para la Construcción en madera y los Bioproductos con los cuales se pueda hacer referencia a la innovación y a los nuevos desarrollos de este tipo.
Las bases precisarán como “iniciativa innovadora” la creada o implementada desde nuevas formas no tradicionales, donde el material provea de un gran potencial de impacto a nivel de investigación, desarrollo, nuevas tecnologías, modelos de negocio, efectos en la economía, etc. Así se buscará impulsar su rol como parte de la sustentabilidad futura del planeta ante problemáticas como el cambio climático, la contaminación, la escasez de recursos naturales y la dependencia de los fósiles.
La innovación en madera ha motivado avances notables en ámbitos como la arquitectura, la ingeniería y el diseño, gracias a su faceta descarbonizante y contributiva en la captura de CO2 en el ambiente y en la mitigación de los gases de efecto invernadero. Por ello, se esperan propuestas relacionadas a los sistemas prefabricados de construcción, biomateriales, biocombustibles, fibras textiles, entre otros.
Los criterios de evaluación del presente certamen serán la Innovación y diferenciación – producto/servicio, modelo de negocios, y/o canales de distribución (20%), el Mercado – Viabilidad económica del proyecto, tamaño de mercado atractivo y en crecimiento (20%), la Escalabilidad – potencial internacional & modelo de negocio escalable (20%), el Equipo – habilidades relevantes y experiencia complementaria, equipo dedicado y diverso (20%) y la Estrategia Go to market – claridad de la estrategia para completar el desarrollo tecnológico/de producto y/o la estrategia comercial (20%).
Del mismo modo que el anterior certamen, este concurso también cerrará sus postulaciones el 15 de agosto, para luego iniciar el proceso que premiará la excelencia de las obras construidas con el material. En ese marco, se remarcarán las iniciativas que presenten componentes innovadores y un alto desempeño técnico en la utilización de madera, extendiendo su convocatoria para arquitectos, estudios y oficinas de Chile y Latinoamérica.
Los proyectos podrán ser de diversos tipos, ya que el concurso aceptará ejemplos de cualquier programa y escala que consideren la materia prima en la estructura o los revestimientos, con un relato coherente entre lo proyectado y lo construido. Las bases exigirán opciones innovadoras, que fomenten el rendimiento y la propuesta conceptual con el material.
La postulación contempla la recepción de un máximo de diez Imágenes, entendidas como fotografías, planos, renders, bosquejos, etc, las que deberán presentarse en formato JPG o PNG —verticales u horizontales— a 72 dpi, en un tamaño aproximado de 1024×683 px y con un peso no mayor a 1 Mb. Adicionalmente, se solicitará la entrega de dos láminas en formato A1 apaisado, en formato PDF, en un peso máximo de 10 Mb.
A la par de lo anterior, se requerirá una Ficha de obra, la que consultará una serie de datos contenidos en las bases, además del título y la fotografía principal del proyecto. Y a partir de ella, se buscará profundizar en la Memoria respectiva, a partir de cuatro tópicos coyunturales a responder en un máximo de 150 palabras por cada uno.
Uno de ellos será la Descripción del proyecto, donde se pedirá la información más relevante desde el punto de vista de su encargo, emplazamiento, partido general, etc. Luego se encontrará la Innovación en el uso de la madera, consultando por la relevancia del material en la propuesta arquitectónica y por la generación de nuevas soluciones.
Se proseguirá con el Desempeño técnico, con la especificación de la madera utilizada y la manera en que fue aplicada y protegida como solución. Esto se complementará con la Propuesta conceptual y/o de impacto, que requerirá la explicación de los autores para saber sus motivos para escoger el material y por qué consideran que su proyecto aportará al desarrollo de la arquitectura en madera.
Fuente: Madera 21