Durante la jornada de este martes la alcaldesa de Ñuñoa, Emilia Ríos, anunció junto a concejales, vecinos y trabajadores afectados por la paralización del megaproyecto inmobiliario en la zona de Plaza Egaña, un esfuerzo en conjunto que busca instalar una mesa de trabajo colaborativa con el objetivo de «darle un marco a este diálogo relevante» y «destrabar esta situación», según explicó la jefa comunal.
Lo anterior, debido al rechazo por parte de la Comisión de Evaluación Ambiental de la RM a la edificación que hasta hace unos días la inmobiliaria Fundamenta levantaba en la esquina de Irarrázaval con Vespucio. Y que se tradujo en una serie de movilizaciones lideradas por trabajadores de la constructora DLP desarrolladas durante la semana pasada en los alrededores de las obras, para luego trasladarse hasta el edificio Consistorial, en la Plaza Ñuñoa.
De esta manera, y «en un ánimo de colaboración y entendimiento», según indicaron desde el municipio, la alcaldesa Ríos se reunió durante la jornada de este lunes con los manifestantes «para escucharlos, y en dicha instancia se acordó llevar a cabo un trabajo colaborativo», que busca, en principio, dar certeza al proyecto. Y afirmó que «por parte del municipio, las certezas han existido hace bastante tiempo».
En este sentido, la edil comentó que «Fundamenta tiene la posibilidad de replantearse este mega proyecto que impactaría de manera muy importante a este sector, como la congestión vial, la densidad habitacional y la poca planificación, para ofrecer una calidad de vida y un acceso a la vivienda a distintas personas». E informó que tanto la comunidad como las autoridades municipales del sector se han «puesto a disposición para seguir aportando certezas y eso significa incluir a trabajadores, trabajadoras, vecinos y vecinas, por supuesto al Gobierno central, con quienes estamos en coordinación para darle un marco a este diálogo tan relevante».
Esperamos poder destrabar esta situación e invitamos a los desarrolladores de este proyecto a que nos replanteemos ahora este proyecto, demos el ejemplo y construyamos ciudad a escala humana».
Por su parte, Carmen Arévalo, presidenta de la Junta de Vecinos Contramaestre Micalvi, se refirió a los eventuales impactos que implicaría la concreción de los trabajos, y apuntó a la densidad poblacional.”Tienen que pensar que por lo menos en mi territorio, en el último Censo éramos 12.500 personas. Si construyen el megaproyecto más los nueve edificios, vamos a llegar a 27.500 personas viviendo en 1 km2. No es vida para el que llega, ni para el que vive ahí«, expresó la dirigenta social.
Por otro lado, desde el grupo de trabajadores de la inmobiliaria Fundamenta, comentaron que «hemos solicitado a las autoridades hoy día que se reevalúe este proyecto, que se siente la inmobiliaria a conversar para ver cómo replantear el proyecto. El otro día nos alegramos cuando leímos que la inmobiliaria estaba dispuesta a modificar el proyecto, esos son los pasos que cada uno debe ir dando para poder avanzar en otro tipo de relación social».
«Estamos velando por el derecho al trabajo, pero a un trabajo digno y justo, en eso coincidimos con los tiempos que hoy tenemos”, concluyó el trabajador.
Fuente: Diario Financiero
