La Cámara Chilena de la Construcción (CChC) divulgó un estudio en el que da cuenta de un aumento del 13% del déficit habitacional en el país, el cual afecta a 2,2 millones de personas, reflejando la necesidad de soluciones habitacionales -ya sea construir o reparar- para cerca de 740 mil familias según el análisis del gremio.
Consultado al respecto, y tras aclarar que no ha podido leer aún el informe de la CChC, pero que sí se ha informado a través de medios de prensa, el ministro de Vivienda y Urbanismo, Cristián Monckeberg, sostuvo esta mañana que «lo que apreciamos es una sorprendente manera de aumentar el déficit de vivienda, a nuestro juicio, para justificar la necesidad de construir más«.
Y es que, según el secretario de Estado, en el análisis del gremio «se junta en una sola cifra la necesidad de vivienda de familias que sí a requieren con viviendas deterioradas. (Esto) se tiene que separar, nunca se han reunido en una sola cifra».
«Lo que aquí hay es una manera de inflar el déficit de vivienda en el ánimo de justificar la necesidad de construir más. Esto porque se reúne en una misma cifra la falta de viviendas con las viviendas que ya existen y que se tienen que mejorar», insistió, acusando «errores metodológicos (…), no es la manera de medir los déficit habitacionales que históricamente se han hecho».
«Quien realiza el informe es un gremio que asocia y reúne a las empresas que se preocupan de construir y que se dedican a la construcción de vivienda«, recalcó el ministro.
Además, Monckeberg manifestó que «no hay nada nuevo bajo el sol» respecto a las propuestas que expuso la CChC para paliar el déficit, «lo que quiere decir que vamos por buen camino».
«Se habla de que tenemos que aumentar la oferta de arriendo, y nosotros estamos avanzando en aumentar esto; habla de densificar zonas céntricas, cosa que venimos haciendo hace bastante rato y tenemos un proyecto de ley en el Congreso en esa línea. Quiere decir que lo que está proponiendo es un punto que ya el ministerio está empujando y está sacando adelante», añadió el titular de Vivienda.
Seguido de ello, continuó, «llama la atención -en estudio- porque el 2018 es uno de los años donde más se ha construido, donde más se ha vendido viviendas y, al mismo tiempo, donde más se han ejecutado los subsidios que han sido utilizado por las familias».
Finalmente, Monckeberg precisó que «el déficit de vivienda hoy día es es en torno a las 400 mil. Esa es la cantidad de viviendas que hacen falta en Chile, y estamos trabajando fuertemente para que cada vez disminuya más».
Fuente: Emol.com
El ministro, no quiere que haya trabajo, es ambiguo no cree en el organismo cchc, parece que atornilla al reves.
Es pensable que el déficit de viviendas esta mas acorde a los números de la CCHC y esto porque si bien es cierto el país había acortado mucho el déficit habitacional, el ingrediente de la migración descontrolada en cifras de estadísticas reales de los migrantes instalados en el país, otorga sin duda el ingrediente para el Déficit aumente.
Hoy en día, basta mirar en los parques y plazas de diversas comunas de Santiago como la gente se ha instalado con carpas , algo que nunca se había visto en este país, porque según recuerdo en los años 80 cuando hubo que enfrentar el problema de la vivienda en forma masiva, a lo menos existían poblaciones de emergencias, la mayoría ordenadas y monitoreadas por los municipios de su sector.
Sin duda la única solución era la construcción en suelo mas barato que con la ecuación de la vivienda, pudiera ser viable para las viviendas sociales.
Hoy día el escenario es distinto, gran cantidad de gente ingreso en el Gobierno de la Sra Bachelet y sin ningún sistema previsto para su desempeño en la sociedad Chilena.
Lo cual trajo graves consecuencias y retroceso en las atenciones de salud y de la vivienda, donde injustamente los puntajes otorgados por el empadronamiento social de migrantes que venían en malas condiciones, le otorgaron prioridad sobre chilenos que estaban esperando en los sistemas de vivienda.
Hoy en dia no es de extrañar entonces que el déficit efectivamente aumento tanto como los chilenos postergados por esta preferencia, como para los mismos migrantes que siguen sumando sin tener aún sistemas que asuman el problema de la vivienda en forma especial para chilenos en espera, ni para los migrantes que aún no pueden entrar en sistemas salariales convencionales.