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El camino del plástico: El reciclaje de un producto eterno para evitar que se transforme en contaminación en el mar

octubre 5th, 2018 | by dConstruccion
El camino del plástico: El reciclaje de un producto eterno para evitar que se transforme en contaminación en el mar
Tecnología
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Actualmente este material no cumple un proceso de reutilización de la forma óptima y se acumula en giros marítimos en todo el planeta, la solución está en su principal característica: su gran duración y moldeabilidad.

SANTIAGO.- El plástico es un material que inventó la humanidad hace más de un siglo y medio, tiempo durante el que no sólo se han fabricado millones de productos desde bolsas hasta marcapasos, sino también se ha olvidado enseñar la forma correcta de manejarlo después de que cumpla su rol en la vida de los usuarios.

«Es increíble que el ser humano inventó un material liviano, moldeable, barato y que no se gasta. No sé cómo logramos que algo que dura para siempre, se transformara en nuestro peor enemigo«, así detalla a Emol uno de los mayores problemas de contaminación de productos que afecta al planeta el gerente comercial de Comberplast, una empresa dedicada al reciclaje de este producto, Michel Compagnon.

Actualmente en el mundo son millones de toneladas de plásticos las que terminan en el mar y son arrastradas por corrientes hacia los denominados «giros». De estos, existen cinco en todo el globo en los principales océanos. A esto, se le suma la acumulación de estos desechos en las costas. ¿El origen? Los usuarios, las industrias, finalmente, es la falta de enseñanza sobre el reciclaje.

«El error es que aprendimos que se bota, que tiene un sólo uso, pero eso no es así. Quizás le pueda servir a una persona una única vez, pero después ese plástico se puede tomar, dejar en un punto limpio, se va a reciclar y se va transformar en otro producto que le va a servir a otra persona o al mismo usuario y así continua», conversa el experto.

¿Cómo se recicla el plástico?

El camino de este material es bastante reiterativo, y es precisamente esa la clave de su mayor ventaja. Cuando un producto cumple su vida útil y es depositado en un punto limpio comienza un proceso que se puede repetir una y otra vez.

Compagnon explica que «esos residuos llegan acá, primero se muelen, después entran a una máquina que los derrite y le quita todas las impurezas, es decir, vuelve a ser plástico sólo y queda un pellet, que tiene forma como de lenteja. Recién ahí tenemos nuevamente materia prima».

Es importante precisar que no siempre es tan simple, el ejecutivo comenta a Emol que «el plástico no es un material, es una familia de materiales y que no son compatibles entre sí, por eso tienen denominaciones de números y hay que separarlos, porque de lo contrario se contaminan y ahí ya no se pueden reciclar».

Luego de este proceso, «se fabrica el producto que uno quiera, con una técnica similar que fabricó el producto anterior».

Con este reciclaje, el plástico puede continuar el mundo útil y así evitar su camino actual desde el uso al mar y de ahí a amenazar los ecosistemas marítimos que actualmente consumen microplásticos o quedan atrapados en redes, incluso mueren tratando de comer trozos más grandes.

El plástico no siempre es malo

Esta idea que puede sonar un poco extraña es avalada por diversos expertos, desde la academia hasta la industria. Para Michel Compagnon la respuesta es un poco más simple: «El plástico no es un material malo, es un material increíble, que si lo aprendemos a usar, nos va a ayudar para siempre. El plástico es un material, no es más que eso«.

El problema comienza con la forma de eliminarlo de la vida de los usuarios cuando a su uso actual no le queda más por ofrecer.

«La gente siempre dice que lo más malo que tiene el plástico es que no biodegrada, nosotros en Comberplast tenemos una visión distinta, sentimos que la principal virtud que tiene el plástico es que no biodegrada, que es un material que no se gasta, que se puede usar eternamente».

A lo que agrega que «la clave está en que si nosotros aprendiéramos a usarlo y que cuando no nos sirve, lo dispusiéramos correctamente. Ese material le va a servir a otra persona con otro producto, y luego cuando se rompa, se puede reciclar de nuevo».

Fuente: Emol.com

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