El desarrollo industrial depende en gran medida de la tecnología y la evolución de los materiales, su objetivo es generar competitividad y construir un mejor futuro para la sociedad.
La globalización ha influido en los niveles de competencia en la industria, y en general la lucha por llevar la delantera es cada vez más dura. El desarrollo de los materiales debe cumplir con exigencias internacionales muy rigurosas, sin embargo el lado positivo son los excelentes resultados que se han generado en el sector industrial.
Las tecnologías orientadas a la industria han experimentado un altísimo nivel de desarrollo en la última década. Las características y aspectos técnicos que deben cumplir son vitales para garantizar la seguridad, economía y rentabilidad.
Es indudable que la movilidad en las comunicaciones juega un papel determinante en la globalización, la tecnología wireless cambió la forma de acceder al ciberespacio, así como los patrones de conducta en la sociedad. En el caso de los teléfonos móviles inteligentes, estos rompieron todos los paradigmas de la comunicación, e incluso permitieron agilizar y optimizar procesos que anteriormente eran casi imposibles de lograr.
En la industria actual existen tecnologías que no son tan conocidas como los Smartphones, sin embargo están generando grandes avances en materia de seguridad, eficiencia y gestión de recursos.
Un ejemplo reciente es la propuesta de un joven arquitecto Francés llamado Timothée Boitouzet, quien realizó un diseño muy ambicioso pero totalmente factible, un tratamiento químico que otorga propiedades especiales a la madera. Boitouzet indica que la madera tiene un gran potencial para innovar y ser usada en edificios modernos.
«El acero era el material del siglo XIX, cemento del siglo XX, y la madera será el material del siglo XXI» agregó Boitouzet en una entrevista pública.
La empresa Woodoo, ha desarrollado un tratamiento que da a la madera nuevas propiedades, entre las que se destaca la capacidad para convertirse en translúcido. Esta idea condujo a la inclusión de Boitouzet en los premios Innovators Under 35 France 2016 de MIT Technology Review. Este tratamiento otorga al material un alto nivel de resistencia a la presión, fuego y agua.
En cuanto a la seguridad de las edificaciones, se han desarrollado tecnologías que permitan controlar elementos de riesgo como los incendios, bien sea en las edificaciones residenciales o industriales.
Existen normativas europeas que regulan las características que deben poseer materiales como los cables de alta resistencia al fuego, usados generalmente para la distribución de energía, sistemas de iluminación de emergencia y alarma contra incendios. Estos cables están fabricados con materiales ignífugos que permiten la operación de circuitos de emergencia por un tiempo prudencial ante una emergencia.
Diversos estudios indican que es posible reducir los riesgos en las edificaciones con el uso de materiales que cumplan con normas de seguridad. De forma progresiva se están actualizando todas las canalizaciones eléctricas residenciales en las grandes ciudades, adaptando su infraestructura a las nuevas normas de seguridad, mejorando notablemente la calidad de vida de los habitantes.
Fuente: Noticias de Almeria