Si bien la industria continuará mostrando signos de desaceleración, la construcción de edificios en la RM aumentará. La tasa de vacancia, en tanto, podría llegar al 10%.
Un año complejo vivió la industria de oficinas en 2016. La desaceleración del mercado y una fuerte alza de stock en ejercicios previos, hizo que el año recién pasado reportara la producción más baja de edificios de oficinas en la Región Metropolitana desde 2009 y la menor colocación desde 2012. Ahora, si bien 2017 se visualiza mejor en algunos indicadores, como producción, el resto de las variables seguirá mostrando una industria deprimida. Así al menos se desprende de las cifras que maneja la consultora inmobiliaria JLL, donde de hecho el nivel de absorción (arriendo) alcanzará su menor nivel desde 2009. Es que si en 2016 se rentaron 131.673 m2 de oficinas en Santiago, en 2017 este dato bordearía entre 100.000 y 110.000 m2, nivel nunca antes visto desde los 55.000 m2 que se arrendaron hace ocho años.
Desde la consultora explican que esta situación responde a varios fenómenos, entre ellos, el ciclo económico, junto con que se prevé que la primera parte del año los precios sigan a la baja para luego estabilizarse en la segunda mitad, lo que frenaría o retrasaría los acuerdos.
En JLL destacan que si bien desde 2014 se comenzaron a ver los primeros descensos en las rentas de Clase A, 2016 cerró con una renta promedio de UF 0,57 /m2, una baja de 9,5% en tres años. “Nos encontramos en un ciclo de mercado a la baja y migrando a un mercado deprimido, donde aún se pueden seguir observando descensos menores en las rentas para luego llegar el peak más bajo y comenzar a estabilizarse”, destaca el country manager de JLL Chile, Marcelo Carrere.
La contracción en los arriendos empujaría al alza el nivel de vacancia. En el ejercicio recién pasado, el porcentaje disponible alcanzó los 8,7% y JLL proyecta que en 2017 el indicador bordee entre el 9,5% y 10%.
Lo anterior respondería también a un aumento considerable en la producción de edificios de oficina. Según la entidad, en 2017 la construcción de oficinas clase A y AB debiera alcanzar los 166.786 m2 -un 50% más que el año recién pasado-, con la incorporación de diez nuevos proyectos distribuidos en Las Condes, Providencia, Vitacura y Huechuraba. El proyecto Torre Costanera será el que más metraje aportará, con 45.000 m2 adicionales.
Para 2018, en tanto, se prevé sumar 133.046 m2 adicionales de la mano de once iniciativas.
“La cifra de producción de edificios de oficinas de 2016 fue una de las más bajas desde el año 2009. Esa situación se debió a que algunos proyectos que estaban para recepción final o entrega dentro del año, no la obtuvieron y quedaron rezagados para el 2017. Ello generó el aumento de las proyecciones de producción que harían crecer el stock total para 2017 en un 5% y un 3,7%, en 2018”, dice Carrere. “Las cifras mencionadas siguen estando dentro de los rangos promedio de producción anual vistos en el mercado de oficinas en los últimos seis años, que están entre 150.000 a 200.000 m2”, añade.
De esta manera, el stock total de iniciativas clase A y AB en la capital pasarían de 3,2 millones de m2 en 2016 a más de 3,5 millones en 2018.
HUECHURABA, LÍDER EN VACANCIA
Si bien en 2016, la vacancia promedió un dígito en la Región Metropolitana, hubo comunas donde el indicador fue mayor. En el caso de Huechuraba, la disponibilidad llegó a 20%. Y entre 2017 y 2018, se prevé el ingreso de nueve proyectos en la comuna por lo que esa cifra podría mantenerse. Desde JLL, sin embargo, auguran que en el corto plazo la alta vacancia tendería a revertirse con la llegada del teleférico bicentenario -en2018- y el desarrollo del tramo Américo Vespucio Oriente a 2020.
Fuente: Pulso
