Además, señala que falta que se recuperen las confianzas en el país, para que la inversión vuelva a crecer.
Los puntos de venta del mercado automotriz debiesen racionalizarse. Ese es el análisis que realiza el empresario Ricardo Lessmann, presidente de Minvest, del Holding Gildemeister, a raíz del momento que está viviendo la industria.
«La red de distribución que había en el país, o que hay todavía, es para una venta de unas 400 mil unidades. Si estamos cayendo a 260 mil o 270 mil, hay paño que cortar, definitivamente», aseguró tras la presentación de la nueva versión de Tucson de Hyundai.
Esta visión ha comenzado a tomar fuerza entre representantes de la industria. Hace unos días Bruno Fritsch señaló algo similar, en el sentido de que el mercado, para 2016 y 2017, va a seguir bajando. «Creemos que la caída que ha habido, que ya es importante, recién es el inicio», dijo.
Lessmann, cuya empresa comercializa diversas marcas de vehículos en países de la región, tiene una visión más optimista y señaló que la crisis del sector «está en su apogeo», por lo que adelante debería tender a mejorar, y negó una caída tan dramática en su estimación para 2016 y 2017.
«La crisis está en su apogeo y me cuesta creer que vamos a seguir cayendo tan dramáticamente. Este año yo creo que la caída, con respecto al año anterior, debiera andar del orden del 20%», estimó.
En esa línea, los gremios automotores han ya ajustado a la baja sus proyecciones de venta para este año, que en el mejor de los casos alcanzará las 270 mil unidades.
Freno en la inversión
Según el ejecutivo, las reformas que impulsa el gobierno debieran apuntar principalmente a frenar la caída del PIB. En ese aspecto, recalcó como un factor que juega en contra del proceso de mejora del panorama económico, es la presencia de «desconfianzas» para que los empresarios sigan invirtiendo.
«No debiera haber una crisis económica más profunda que la que tenemos hoy en día, que es suficiente. Ojo que no la estoy mirando en menos», dijo.
Luego agregó que «el país ha dado señales suficientes, hasta ahora, para que haya mucha desconfianza. A mí me costaría mucho invertir más acá».
Los chinos no se van
Lessmann cree que la actual baja en la venta de vehículos no afectará necesariamente a las marcas chinas, como han planteado otros empresarios.
El presidente de la distribuidora de Hyundai sostuvo que en su última visita al gigante asiático pudo apreciar que los fabricantes de ese país analizan la forma para que las grandes compañías absorban a las más pequeñas. Esto, según su visión, consolidaría a las marcas presentes en Chile, lejos de sacarlas.
«Yo diría que no son los chinos los que van a salir», explicó.
Fuente: Diario Financiero
